Hace tiempo un amigo, a
quien admiro y respeto cada día más, me dijo:
─ ¡No te engañes Martín, existe la ley,
la justicia es otra cosa!
En la ya comentada ”carpeta de dibujos” encontré dos dibujos que vienen al pelo de lo
arriba expresado. Ahora no podría hacer otros nuevos que fueran más
representativos de tan tremenda frase.
Y pensar que fueron hechos
hace quince años y, sin embargo, son tan tremendamente actuales. No tenían
título; ahora se lo he puesto.
El primero, y no pretendo
echarme flores, es limpio, simétrico, equilibrado, luminoso, con color; como a
mi juicio debe ser la ley.
Martín
Alía.
“La ley”. Tinta y acuarela/cartón.
26-04-98.
El segundo es caótico,
tortuoso, gris, oscuro, como gran parte de nuestra justicia; en último término,
a modo de horizonte, insinué el mar, la luz.
Martín
Alía.
“La justicia”. Tinta y acuarela/cartón.
1998.
¡Ojalá, a nosotros, esa luz
nos llegue pronto!